Cuando convives en pareja o con tu familia, pueden aparecer muchos problemas de comunicación, y sentirte frustrado por cosas como “no me escucha, no me entiende” o incluso llegar a sentir que no hay posible comunicación sin acabar alzando la voz y diciendo cosas de las que, posiblemente, luego te acabas arrepintiendo.
Entre muchas de las técnicas conocidas para este tipo de problemas te voy a contar en qué consiste la “Técnica del semáforo”
Se trata de aprender a seleccionar el momento adecuado para comunicarse, haciendo referencia a que las personas somos como un semáforo. Cuando estamos en rojo la comunicación no es posible y tratar de hacerlo sería muy arriesgado, por lo tanto debe cortarse de inmediato la comunicación y esperar. Estar en naranja conlleva un menor riesgo pero sigue siendo recomendable esperar al momento óptimo, que, como ya supondrás, es el verde.
Es sólo cuando ambos asumen estar “en verde” que podemos comunicarnos, siempre desde la empatía y desde el cariño que nos une.
Esta técnica no solo permite tranquilizarnos tras un momento tenso sinó que también aporta el tiempo que necesitamos las personas para reflexionar en lo que puedes aportar tú como individuo para evitar evitar enfrentamientos tan desagradables.
Aprender a comunicarnos con los otros conlleva un trabajo personal importante y adquirir herramientas esenciales para garantizar el entendimiento mutuo.